TOMA DE DECISIONES
La toma de decisiones es un proceso sistemático y racional a través del cual se selecciona una alternativa de entre varias, siendo la seleccionada la optimizadora (la mejor para nuestro propósito).
Tomar una decisión es resolver diferentes situaciones de la vida en diferentes contextos: a nivel laboral, familiar, sentimental, empresarial, etc.
Tomar la correcta decisión en un negocio o empresa es parte fundamental del administrador ya que sus decisiones influirán en el funcionamiento de la organización, generando repercusiones positivas o negativas según su elección.
Para ello se debe tener en cuenta unos aspectos muy importantes para la
toma de decisiones:
1. Identificar la necesidad de
decisión
En primer lugar debemos identificar
la necesidad de tomar una decisión, es decir, debemos identificar una situación
en donde se haga necesario el tomar una decisión.
2. Desarrollo de alternativas
En segundo lugar debemos hacer una
lista de alternativas de decisión, es decir, una lista de alternativas que
tenemos para resolver el problema, o para aprovechar la oportunidad que se ha
presentando.
3. Evaluar alternativas
Una vez que contamos con una lista de
alternativas, debemos evaluar cada una de ellas. Para ello debemos analizar
bien las ventajas y desventajas de cada una, y considerar las consecuencias que
podrían tener en el corto y en el largo plazo.
4. Seleccionar la mejor
alternativa
Una vez analizadas las alternativas
propuestas, en base a dichos análisis, seleccionamos la mejor alternativa, es
decir, aquella que consideramos que nos pueda brindar los mejores resultados al
momento de resolver el problema, o al aprovechar la oportunidad.
5. Implementar la decisión
Una vez seleccionada la alternativa o
decisión que vamos a tomar, debemos hacerla efectiva.
Hacer efectiva la decisión, incluye
comunicar la decisión a todas las personas afectadas, y hacer que todas ellas
la acepten y se comprometan a ponerla en práctica.
6. Evaluar la eficacia de la
decisión
Y, finalmente, una vez que hemos
puesto en práctica la decisión, debemos hacerle seguimiento, y asegurarnos de
que esté dando los resultados esperados.
Notas finales
Mientras más importante sea la
decisión a tomar en la empresa (por ejemplo, decisiones sobre el lanzamiento de
un nuevo producto, sobre la incursión en nuevos mercados, u otras decisiones
que podrían tener consecuencias en el rumbo de la empresa), mayor será el
cuidado que debemos tener al momento de tomarlas (por ejemplo, podríamos
considerar mayores alternativas, recabar una mayor información, tomarnos un
mayor tiempo, o realizar un mayor análisis a las alternativas propuestas).
Para muchas personas, tomar decisiones
importantes en la vida les supone un cierto temor o al menos incertidumbre, por
si se elige incorrectamente. Cuando se trata de decidir una ocupación o unos
estudios, éste proceso está cargado de inseguridad, porque sabemos que esta
elección va a marcar nuestro estilo de vida y porque somos conscientes que
estamos decidiendo nuestro futuro profesional y vital.
Tomar una buena decisión
consiste en trazar el objetivo que se quiere conseguir, reunir toda la
información relevante y tener en cuenta las preferencias del que tiene que
tomar dicha decisión. Si queremos hacerlo correctamente, debemos ser
conscientes de que una buena decisión es un proceso que necesita tiempo y
planificación. Por ello la única manera de tomar una buena decisión es a través
de la aplicación de un buen procedimiento, o modelo de toma de decisiones, el
cual nos ahorrará tiempo, esfuerzo y energía.
• Concentrarse en lo
realmente importante.
• Realizar el proceso de
forma lógica y coherente.
• Considerar tanto los
elementos objetivos como los subjetivos y utilizar una estructura de
pensamiento analítica e intuitiva.
• Recoger la información
necesaria para optar o elegir.
• Recopilar las
informaciones, opiniones, etc..., que se han formado en torno a la elección.
• Ser directos y flexibles
antes, durante y después del proceso.